Ayuda a Africam Safari a “puerta cerrada” y vive una experiencia única en una nueva modalidad para visitar el parque de conservación.
Africam Safari es un parque de conservación de vida silvestre mexicano ubicado a 16.5 km de la ciudad de Puebla. Los animales deambulan en libertad controlada y cautiverio. Esta acreditado por la Association of Zoos and Aquariums y por la World Association of Zoos and Aquariums.
El parque fue fundado por el Capitán Carlos Camacho Espíritu, empresario, locutor y piloto aviador de Puebla. En sus viajes se hizo de ejemplares con los que formó una colección privada de animales en su residencia. Como era muy visitada, decidió abrirla al público en abril de 1972. Promoviendo así el aprecio por la fauna, en condiciones semejantes a su hábitat natural para favorecer su subsistencia y reproducción.
A causa de la pandemia por coronavirus, el parque está cerrado y “Africam a puerta cerrada” ofrece a los visitantes tener contacto directo con los animales. Además, recibirás una explicación sobre su hábitat y otras actividades recreativas.
Frank Camacho, director del parque, explicó que lo recaudado por este servicio irá al 100% a programas de conservación de animales.
Precio e información
La aportación para cualquiera de las actividades es de 5 mil pesos y es para familias de 1 a 5 integrantes.
Acompañada de un experto, tu familia puede ser parte durante dos horas y media aproximadamente. Ayuda a preparar alimentos y entrégalos tú mismo a los increíbles animales, apoya la conservación con accesos y cercanía que normalmente no son posibles.
Los interesados en esta modalidad deberán reservar, ya que la taquilla se encuentra cerrada.
Tras la autorización para abrir el Bosque de Chapultepec en la Ciudad de México, la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM) pidió a las autoridades el permiso para reabrir los parques.
Ernesto Zazueta, presidente de AZCARM, consideró que, tras dos meses de confinamiento, la población debe contar con espacios abiertos que le permitan volver a tener contacto con la naturaleza de manera controlada y segura.
