Como con cualquier problema de salud, el primer paso para recuperarse es identificar los signos.

Estos 7 hábitos alimenticios, de ejercicio y vida social, según un nutriólogo funcional y un psicólogo, pueden indicar problemas subyacentes con su relación con la comida.

7 hábitos alimenticios peligrosos que debes dejar este año.

1. Hacer ejercicio para "quemar" calorías

Esta mentalidad "establece una guerra entre tu mente y tu cuerpo", dice Lindsay Brancato, psicóloga y psicoanalista con certificaciones en psicología alimentaria. "Es una forma muy en blanco y negro de pensar sobre la comida, el ejercicio y nuestros cuerpos, y refleja algunas creencias nutricionales tóxicas".

Si piensas en ejercicio en términos de calorías quemadas o alimentos compensados, la psicóloga pegunta:"¿No mereces comer si no has hecho ejercicio? ¿Te estás castigando por la grasa en tu cuerpo?"

El ejercicio debe sentirse bien, en pocas palabras. No es un castigo. Cuando hace ejercicio como castigo, puede volverse contraproducente. La clave para superar esto es revisar tu mente y tu cuerpo todos los días. Tus elecciones deben provenir de un lugar de nutrición, no de castigo, explica Brancato.

2. Prohibir ciertos alimentos de la casa

Algunas personas no tienen cierta comida en la casa porque la devorará toda de una sola vez. Si bien esto no siempre indica una relación poco saludable con la comida, con certeza puede hacerlo, especialmente si nunca puedes dejar de pensar en dicha comida.

Esto envía el mensaje a su cerebro de que la comida está prohibida porque no se puede confiar en usted con esos alimentos, dice Brooke Glazer, asesora de nutrición de RSP Nutrition.

"Este mensaje es desalentador y, a menudo, motiva a las personas a encontrar reglas alimentarias externas, a menudo de una dieta, para seguir, en lugar de escuchar la sabiduría interna de su cuerpo que sabe qué y cuánto comer", explica.

La solución es, de hecho, mantener los alimentos "prohibidos" dentro de su hogar, pero a un ritmo lento. En lugar de abastecerse de varios alimentos a la vez, comience con solo uno o dos alimentos nuevos.

Muchas personas se sienten más seguras con paquetes de una sola porción,. Si esto alivia un poco la ansiedad por mantener los alimentos en su hogar, compre snacks en porciones individuales.

"Todos los alimentos están permitidos y es importante cumplir con sus antojos o es posible que no desaparezcan", dice Glazer. "Practica comer una porción de alimento para el miedo todos los días. Saber que lo tendrás nuevamente mañana podría evitar que comas en exceso hoy".

3. Evitas las actividades sociales debido a la ansiedad por la comida.

Este hábito vive en la misma línea que el anterior. Evitar actividades sociales, como cenas, fiestas de cumpleaños, reuniones familiares o incluso reuniones de trabajo, por miedo a la comida indica un problema, dice Glazer.

"Está eligiendo mantenerse seguro en sus elecciones de alimentos en lugar de pasar tiempo con familiares y amigos", dice ella. "La comida es una parte tan importante de las relaciones y de tu vida social, por lo que podrías terminar perdiéndote alegrías de la vida".

Sin embargo, puedes vencer el ciclo.

"Rompe tus reglas alimentarias y elige participar en tu vida diciendo sí a los planes [sociales] y comiendo lo que se ofrece", dice Glazer. "Tu cuerpo sabe qué hacer con la comida que le pones y puedes confiar en él".

Elegir conscientemente comer una variedad de alimentos también puede ayudar, dice Glazer. Por ejemplo, si quieres pastel de cumpleaños, cómelo. Pero también coma frutas o verduras

4. Sentir un intenso sentimiento de culpa durante o después de comer, especialmente después de comer alimentos "malos".

Sentirse culpable mientras comes o después de comer es un ejemplo de que la comida tiene control sobre ti, en lugar de que tu tengas el control de tus elecciones de la comida.

"Sin embargo, esto no es necesariamente nuestra culpa. Muchos alimentos pobres en nutrientes se fabrican para ser muy sabrosos", "Están cargados de sal, azúcar y grasas y aceites procesados ​​que hacen que estos alimentos sean deliciosos y adictivos".

Está más que bien disfrutar de alimentos muy sabrosos, como postres, papas fritas y refrigerios empaquetados; decirse a sí mismo que no puede comerlos podría resultar en un ciclo de atracones restringidos.

"Es importante reconocer el estrés adicional que pones en tu cuerpo al torturarte con estos sentimientos de culpa". Estás mejor si tomas conscientemente la decisión de comer esos alimentos, disfrutarlos y luego continuar con tu día".

Una vez que se elimina el estigma de que esos alimentos son malos y sigues adelante, no tiene el mismo control sobre ti",

No es un proceso indoloro cambiar ese guión, pero se puede hacer, y eventualmente podrá disfrutar plenamente de sus comidas favoritas.

5. Eliminar grupos completos de alimentos sin una razón médica

La gente se pone a dieta por muchas razones. A veces, los problemas de salud requieren dieta particular, y otras veces, los valores morales guían la decisión de una persona de comer de cierta manera. Por ejemplo, las personas que comen una dieta sin gluten pueden tener enfermedad celíaca o intolerancia al gluten. Las personas que comen una dieta vegana pueden tener valores relacionados con la salud ambiental y el bienestar animal. Algunas personas eliminan los alimentos simplemente porque no se sienten bien después de comerlos.

Pero otras personas eliminan los alimentos sin ninguna razón real. Si eliminó un grupo de alimentos porque una revista o publicación de Instagram le dijo que lo hiciera, o porque le asignó una etiqueta de "malo" al alimento, podría indicar un problema. Puedo hablar por experiencia sobre esto: una vez renuncié al pan porque crecí pensando que el pan me haría subir de peso. No tengo ninguna aversión física al pan (o al trigo en general), por lo que mi elección se basó puramente en el miedo, y solo me hizo desear más el pan.

En lugar de elegir alimentos en función del miedo a aumentar de peso, elija alimentos en función de cómo lo hacen sentir. "Como sociedad, ya no estamos en contacto con cómo nos hace sentir la comida", dice St. Germain. "De hecho, muchas personas no se sienten bien, pero se han sentido así durante tanto tiempo que creen que la fatiga, la diarrea, los calambres, la acidez estomacal o el estreñimiento son 'normales'".

"Si van al médico, se les da una receta para 'arreglarlo' cuando en realidad todo lo que necesitan es algo de conciencia sobre cómo les afectan ciertos alimentos", dice, y agrega que llevar un diario de alimentos y estado de ánimo es una forma fantástica de ponerse en contacto con cómo los alimentos te hacen sentir física y mentalmente.

6. Sentirse fuera de control al comer ciertos alimentos

Ese sentimiento de "no puedo comer solo uno" podría significar que estás restringiendo demasiado.

Las personas que sienten que no pueden controlarse con ciertos alimentos a menudo sufren las asignaciones morales que la sociedad ha asignado a los alimentos, dice Alex Turnbull, dietista.

"En el mundo de hoy, la comida tiende a etiquetarse como 'buena' o 'mala'", dice Turnbull, lo que hace que las personas se sientan culpables y avergonzadas cuando comen (o incluso piensan en comer) algunas de sus comidas favoritas.

Las cosas empeoran cuando no te permites disfrutar de esos alimentos, La sensación de restricción crece y crece hasta que no puedes soportarlo más, y puedes terminar comiendo en exceso la comida que te has estado negando. Para las personas con hábitos alimenticios desordenados, esto puede convertirse en un círculo vicioso de atracones.

Realmente solo hay una solución para este mal hábito y es incorporar los alimentos de manera regular", dice Turnbull. "Cuando te sientes fuera de control, esto puede significar que te estás restringiendo demasiado. Al permitirte disfrutar de todos los alimentos en cantidades adecuadas, puedes disminuir o eliminar esa terrible sensación de agobio".

7. Probar constantemente nuevas dietas

Una dieta verdaderamente sostenible incluye alimentos que le gustan, incluso aquellos que tradicionalmente se consideran "poco saludables".

Saltar de una dieta a otra puede indicar que tienes una relación tensa con la comida o con tu imagen corporal.

"No es necesario buscar muy lejos para encontrar investigaciones que demuestren que las dietas simplemente no funcionan", dice Turnbull. "A menudo, las dietas de moda están llenas de promesas vacías, son demasiado restrictivas y te dejan insatisfecho y, lo que es más preocupante, desnutrido".

Muchas dietas eliminan grupos de alimentos completos o minimizan las calorías hasta un punto poco realista que no se puede mantener a largo plazo, dice, lo que finalmente lleva a comer alimentos fuera de la dieta. "Una vez más, te quedas con la culpa, la falta de nutrientes esenciales y cero energías para hacer algo".

"Aborda la alimentación con una mentalidad de 'todos los alimentos pueden caber' y haz cambios menores", sugiere Turnbull. "Permítete disfrutar de los alimentos que te gustan, mientras haces un esfuerzo por incluir los alimentos que te alimentan de manera óptima".

Fuente: Cnet.

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Tema: hábitos alimenticios peligrosos que debes de dejar este año.